
Cuantas veces hemos soñado amaneceres naranjas como la piel de una diosa.
¿Quién no ha soñado con bosques mágicos? Cuantas veces hemos soñado amaneceres naranjas como la piel de una diosa. Adoro llevarme sorpresas, y La Gomera fue una de ellas. No es mucho más lo que puedo hablar de ella que lo que he disfrutado revelando que no photoshopeando esta historia de paisajes y amaneceres, del mar y del hombre, de magia y naturaleza.
Voy a dejar que la Isla comandada por el extraordinario Garajonay os hable con imágenes. ¡Me encantaría volver!
PD: Esta Galería se la tengo que dedicar a mi hermano Fran que cumple años hoy. ¡Felicidades!